martes, 19 de febrero de 2008

Payerou


He aquí la razón por la que España es el único país de Europa en el que el Mitsubishi Montero se llama Mitsubishi Montero.

4 comentarios:

Mystra dijo...

payeiroouuu!!! payeiroou!!
Pues increible pero cierto! vi un pajero el otro día por aquí! (el cooche guarrillos) y tenía matrícula normal... seguro que fue a posta hasta allí para comprarlo... Si lo hubieran vendido aquí habría tenido mucho éxito, seguro! :p.

Tonteridas a parte, os mando un besote enorme, wapos!! quero veros yaaa! ^^

Alfonso dijo...

La verdad es q mola más que se llame Pajero!!! Ahí todo campestre...

Bueno, que ya falta menos para que nos veamos en el Extremusika!!!

Que hay ganitas ya.

Besos y abrazos de la tierra.

Anónimo dijo...

Soy un miserable desgraciado!!! lo sé, espero que me disculpen por mi ausencia virtual, no voy a argumentar esto con peroratas innecesarias de autocompasión, simplemente soy un neurótico trabajador sobrepasado por la exigencia, numeros y reuniones.

Bueno, comentarles que leí el post del señor de los anillos y me pareció genial, ya me imagino lo frustrante que debe ser para alguien que le interese esas cosas que cada tipo la interprete de forma distinta, me recuerda un poco la biblia y una obra de teatro que vimos hace poco, la representación de la representación de una representación, es demasiado probable que no sea fiel copia de la verdad, algo asi como "hey, ese si que se parece a Cristo..."

Bueno, sobre los "Pajero" yo he visto alguno por Chile y lo mas gracioso es que vi a uno que la letra P se la desmontó, la partió y con ella creó una "Vi" y al pegarla quedó como "Viajero", me causó mucha gracia y siempre lo recuerdo. No sé la connotación que tiene en españa la palabra pajero acá al menos es para señalar a las personas que hacen de la mansturbación su meta en la vida.

Eso chicos, espero que sigan soportando estoicamente a los pesados y desabridos ingleses.

Saludos, exitos miles.

Anónimo dijo...

En Chile, "pajero" es aquel que abusa del hábito de la masturbación. Dícese también de un trabajo farragoso, largo, tedioso de llevar a cabo. Acá también se llama Montero.